Condado de Mayo

Desde espectaculares playas con bandera azul hasta inhóspitas pero fascinantes zonas pantanosas, Mayo no dejará de asombrarte ni un solo momento. Se considera uno de los destinos de visita obligada de Irlanda, y con razón. Tiene todo lo que hace que la isla de Irlanda sea especial: acogedores e interesantes ciudades y pueblos, lugares históricos repletos de historias y patrimonio, y, por supuesto, paisajes increíbles y extensos que son dignos de postal. Pero no es solo un lugar fantástico para visitar…

¿Mayo es el mejor lugar para vivir en Irlanda? ¿Su ubicación en pleno corazón de la Ruta Costera del Atlántico hace que sea más especial que otros lugares? En una palabra: ¡Sí! Cuenta con algunos de los lugares más bellos de la isla, desde extensas playas con bandera azul hasta emblemáticas casas históricas. Además, está salpicado de algunos de los pueblos más acogedores y memorables que encontrarás en la isla, por ejemplo, Westport. Cuando el periódico “Irish Times” preguntó a sus lectores cuál creían que era el mejor lugar para vivir en Irlanda, la ciudad georgiana lideró la votación. Por otra parte, los visitantes que disfrutan las historias sobre la reina pirata Grace O'Malley en Westport House, los restaurantes de estilo gourmet como An Port Mór, la música tradicional y las playas perfectas para practicar surf, navegar y vivir aventuras al aire libre en la cercana bahía de Clew estarán de acuerdo con ese resultado.

Por supuesto, hay más cosas en Mayo aparte de Westport. Piensa en la cosmopolita ciudad de Castlebar o en el cercano Museo Nacional de la Vida Rural. Piensa en Ballina, la capital del salmón de Irlanda, situada junto al río Moy. Piensa en la zona pantanosa del Parque nacional de Ballycroy o la remota península Mullet, región de habla irlandesa en la baronía de Erris. Piensa en Downpatrick Head, un espectacular cabo de gran belleza con su islote conocido como Dún Briste y las ruinas de una iglesia que marcan el lugar donde San Patricio difundió el mensaje del cristianismo. Siguiendo hacia el oeste, el siguiente distrito es Boston, en EE. UU…

En Mayo también se encuentra la isla de Achill, la mayor isla de Irlanda y la que ofrece un acceso más fácil (está conectada a tierra firme por un corto puente de carretera en Achill Sound). Achill cuenta con cinco playas con bandera azul, una ecoetiqueta voluntaria otorgada a aquellas playas que cumplen todos los requisitos de calidad y limpieza. Se prevé que la cifra aumente porque, gracias a la Madre Naturaleza, una playa dorada desaparecida hace 33 años reapareció en Dooagh hace varios años para el absoluto deleite de los lugareños. Además, puedes pasear por la naturaleza salvaje o disfrutar del surf, como espectador o cabalgando las olas, y explorar un pueblo abandonado en la ladera de la montaña de Slievemore. Es un lugar tan desolado y vacío como agradables y acogedores son los pubs.

A Paul Henry, oriundo de Belfast, le enamoró tanto Achill que cuando la visitó para pasar unas vacaciones de dos semanas en 1910, lanzó su billete de vuelta al mar y se instaló en la zona durante varios años. En otra ocasión, cuando el escritor alemán Heinrich Böll visitó la isla de Achill en la década de 1950, comentó que se sentía como si “abandonara Europa”. La mayor isla de Irlanda sigue pareciendo de otro mundo, sobre todo si disfrutas de un paseo por alguna de sus playas, en especial la de Keem.

Después de visitar Achill, pon a prueba tu resistencia con una escalada hasta la cima cubierta de pedregales de la montaña de Croagh Patrick. Da un paseo en bicicleta por la Great Western Greenway, una ruta ciclista de 41 km fuera del asfalto que discurre paralela a la antigua línea ferroviaria de Westport a Achill. Disfruta de las vistas de todas las islas en la bahía de Clew, escala de la legendaria reina pirata de la Irlanda del siglo XVI, Grace O'Malley. Se dice que aquí hay tantas islas como días tiene el año. O descubre los secretos de la Edad de Piedra que pueden encontrarse en los Campos de Céide, donde pantanos y ciénagas mantienen a salvo sus tesoros de 5.000 años de antigüedad.