Dolmen de Poulnabrone

El dolmen de Poulnabrone lleva entre 5200 y 5800 años erguido sobre una meseta elevada en medio del paisaje de piedra caliza kárstica del Burren. Eso sí que es impresionante. Pero aún más impresionante es pensar que los pobladores neolíticos pudieran maniobrar para colocar en su sitio las dos grandes piedras del portal y la enorme piedra horizontal de remate, moviendo y colocando esas enormes rocas, que en algunos casos pesan hasta 1,5 toneladas.

En irlandés, el nombre Poulnabrone significa «el agujero de los dolores», un nombre apropiado para un lugar de entierro sagrado. En las excavaciones llevadas a cabo en el yacimiento en la década de 1980 se encontraron los restos de 33 personas, y la datación por radiocarbono ha demostrado que la tumba estuvo en uso unos 600 años. Además de restos humanos, los arqueólogos también encontraron tesoros antiguos, como un hacha de piedra, puntas de flecha, cuentas, un colgante de hueso, cristales de cuarzo y piezas de cerámica. Puedes ver muchos de estos artefactos en el Museo de Clare, cerca de Ennis.