Strangford Lough

En los márgenes orientales de Newtownards, la abadía de Movilla reposa en una paz bien merecida. Sus muros en ruinas no son un justo reflejo de la resiliencia de este inmenso monasterio que fue fundado en el año 543 y, tras sufrir el saqueo de los vikingos en el siglo IX, fue refundado como una abadía agustina tres siglos después, antes de ser incendiado y reconstruido de nuevo. ¡Uf! Pasea por las ruinas o acércate al aeródromo de Newtownards para disfrutar de una vista aérea. En pleno corazón de la ciudad, el centro de información para visitantes de Newtownards presume de sus artistas y artesanos locales con multitud de obras únicas expuestas.

¿Qué mejor manera de empezar el día que con la caricia de la brisa salada y húmeda del mar en la cara mientras paseas por el muelle de Donaghadee? El faro de piedra caliza que encontrarás al final data de 1836, pero el montículo que se eleva sobre la ciudad es aún más antiguo y ofrece unas vistas marinas espectaculares hasta las serenas islas Copeland. Entra en Grace Neills, uno de los pubs más antiguos (¡y más encantados!) de Irlanda, y disfruta de una pinta fría en el mismo lugar que visitaron Daniel Defoe y Pedro I de Rusia. Visita el molino de viento de Ballycopeland para ver un poco de tradición en acción. Es el único molino de viento en funcionamiento del este de Down ¡y cuenta con cuatro plantas de altura y más de dos siglos de antigüedad!

En la orilla este de Strangford Lough, el majestuoso Mount Stewart y sus fantásticos jardines en flor dan la bienvenida a todos los visitantes. Construida en el siglo XVIII, esta mansión neoclásica alberga un tesoro oculto de arte, esculturas y curiosidades recopilado a lo largo de los siglos por la viajera familia Stewart, mientras que los jardines son un delicado y perfecto equilibrio entre un diseño cuidado y una belleza natural rico en detalles italianos. Pasea por la Dodo Terrace y descubre si puedes sentir ese toque florentino... ¿Por qué no visitas las tiendas de antigüedades en el cercano pueblo de Greyabbey y empiezas una colección internacional propia?

El torreón, la lavandería victoriana y esas interminables rutas verdes: con más de 323 hectáreas de jardines ornamentales junto a la orilla de Strangford Lough, el castillo de Ward es un patrimonio de eternas intrigas. Los fans de Juego de Tronos® se sentirán como en casa aquí, donde la fusión única de la arquitectura clásica y gótica convirtió esta propiedad amurallada en el escenario perfecto para Invernalia. Toma el ferry que cruza los Narrows, el rápido cauce de agua por el que Strangford Lough se une al océano en Portaferry.

Pisa suavemente en Downpatrick, porque caminas sobre tierra sagrada. Décadas después de navegar por primera vez por Strangford Lough en el siglo V, San Patricio fue enterrado en la actual ubicación de la catedral de Down, dejando atrás su indeleble legado como apóstol de Irlanda. Con sus elaboradas vidrieras, el órgano antiguo y sus agujas ornamentadas elevándose orgullosas hacia el cielo, esta magnífica catedral es una silueta irreemplazable en el paisaje del condado de Down, al igual que el Museo del Condado de Down, a solo 100 metros de distancia. Visita esta cárcel reconvertida y repasa 9.000 años de historia de la humanidad. Cerca se encuentra la iglesia de Saul: una sencilla iglesia de piedra en la antigua ubicación del granero donde San Patricio rindió culto por primera vez en Irlanda, en el año 432.

Iglesias, monasterios y capillas salpican la campiña de Irlanda, repletos de historias de devoción, conversión y erudición. Pero la abadía de Inch tiene un origen más inusual. La abadía de Inch se construyó a modo de disculpa después de que un caballero sanguinario arrasara la anterior ubicada en el mismo lugar, pero a juzgar por los fantasmas que aún recorren las ruinas, no estamos seguros de que el caballero llegara a recibir el perdón… Haz que tu viaje sea más especial tomando un tren de vapor tradicional desde Downpatrick hasta aquí.

Con partes que datan de 1180, se cree que Killyleagh es uno de los castillos habitados más antiguos del país. Tiene todos los ingredientes para ser un clásico de Disney: mazmorras, escaleras de caracol, bonitos torreones y pasadizos secretos. Aunque el propio castillo es privado y una casa del guarda voló por los aires en 1649, hoy en día los visitantes pueden optar por alojarse en las torres.

Oculta en la isla de Mahee, se encuentra Nendrum, una estrecha franja de tierra que se adentra hacia el centro de Strangford Lough. Fundado por San Machaoi ya en el siglo V, este es el mejor ejemplo de un enclave monástico prenormando de Irlanda del Norte. Hoy en día, las tres estructuras circulares de piedra seca, las celdas en forma de colmena y la torre circular recuerdan a una época de santos y eruditos en la que los ataques vikingos eran una amenaza. Visita el centro de visitantes; es pequeño, pero allí encontrarás todo lo que necesitas saber. Si dispones de más tiempo, haz una pausa para comer algo en Daft Eddy’s y admira las vistas panorámicas del lago mientras disfrutas de una suculenta comida.

Si tienes más tiempo, visita el Strangford Lough Activity Centre, donde podrás disfrutar de diversas y divertidas actividades al aire libre, como el surf de remo y el kayak. En tierra, puedes probar suerte con el tiro con arco, las técnicas de supervivencia e incluso el lanzamiento de hachas. Si lo que buscas es acción en Strangford Lough, la encontrarás aquí.

A 160 metros sobre el nivel del mar, la torre Scrabo es un monumento a la caridad, construido para dar las gracias al tercer marqués de Londonderry por sus iniciativas para aliviar el sufrimiento de los lugareños durante la Gran Hambruna. Aunque es una vista verdaderamente hermosa, la torre no puede compararse con las vistas que ofrece la colina de Scrabo sobre el paisaje del condado de Down… Strangford Lough, su legión de islas y las altas montañas de Mourne se despliegan ante ti, con la isla de Man y la costa de Escocia en la distancia.