Condado de Waterford

Waterford se encuentra en el Ancestral Este de Irlanda y tiene un poco de todo. Este condado costero cuenta con una ciudad animada, playas increíbles, una cordillera épica y pintorescos pueblos y localidades a orillas del mar. Por tanto, independientemente de lo que te apetezca, ¡seguro que Waterford lo tiene!

Waterford es una ciudad que mantiene viva con orgullo su rica historia, y no es de extrañar, ya que los vikingos la fundaron en el año 914, por lo que es una de las más antiguas de la isla de Irlanda.

Aquí la influencia vikinga está muy presente, sobre todo en el triángulo vikingo, llamado así por los muros vikingos que en su día rodearon la zona. Incluso el nombre de Waterford proviene del término nórdico antiguo «Veðrafjǫrðr», que significa «fiordo ventoso». 

En 1170, Waterford inició un importante periodo de su historia cuando se apropió de ella Strongbow, un guerrero anglonormando que luchó en nombre de Dermot MacMurrough, rey de Leinster. Algunos de los tesoros más fascinantes de estas dos épocas se exhiben en Waterford Treasures, que consta de cinco museos (Museo Medieval, Torre de Reginald, Palacio del Obispo, Museo del Tiempo y Museo de la Plata) en el centro de la ciudad.

Entre ellos se encuentra el Great Charter Roll de 1373, un documento histórico que muestra la ciudad con el aspecto que tenía en el siglo XIV, y el magnífico broche de oro y plata denominado Waterford Kite Brooch.

Definitivamente, merece la pena explorar estos museos a un ritmo relajado. La torre de Reginald, en particular, es un lugar fascinante. En el año 914 se construyó la primera torre, que los anglonormandos reconstruyeron en el siglo XII. Es el edificio civil más antiguo de Irlanda y lleva más de 800 años utilizándose para diversos fines. En la actualidad, alberga una exposición de tesoros vikingos.

Si ver artefactos no es suficiente, también puedes vivir como un vikingo con la experiencia de realidad virtual de King of the Vikings. ¡Te encontrarás en una casa vikinga reconstruida donde podrás vivir su mundo de cerca!

Pero Waterford no es un destino fascinante solo por su historia. La ciudad también es conocida por sus «blaas», deliciosos panecillos de harina blanca que son exclusivos de Waterford y cuentan con Indicación Geográfica Protegida de la UE. Además, está Waterford Crystal, una de las marcas de vidrio tallado más prestigiosas del mundo.

El condado de Waterford es famoso por sus hermosos paisajes, desde calas espectaculares hasta exuberantes pastos verdes y montañas inquietantemente bellas. También está repleto de tesoros históricos, como imponentes mansiones y jardines, enclaves monásticos y castillos impresionantes.

Uno de los más hermosos es el castillo de Lismore, en el pintoresco pueblo de Lismore. Se trata de una residencia privada, pero podrás explorar sus casi tres hectáreas de jardines amurallados, con sus plantas y arbustos, así como varias frutas y verduras que se usan en la cocina.

A las afueras de la ciudad encontrarás los jardines de Mount Congreve, un jardín de 28 hectáreas con vistas al río Suir y compuesto por miles de árboles, plantas y arbustos. Otra opción es Cappoquin House, donde podrás visitar la casa y sus dos hectáreas de jardines.

Si quieres retroceder en el tiempo, visita la casa y los jardines Curraghmore. Esta propiedad data del año 1170 y tiene una superficie de más de 1.000 hectáreas, con más de 400 hectáreas de antiguo bosque de robles y jardines formales para disfrutar a tu aire.

Dirígete al oeste y encontrarás uno de los emplazamientos cristianos más antiguos de Irlanda: la torre redonda y la catedral de Ardmore. La catedral fue fundada por San Declán en el siglo V y cuenta con una impactante torre redonda construida en el siglo XII. Además, hay una ermita oculta en lo alto de los acantilados cercanos.

También hay muchas ciudades y pueblos animados para explorar, como las bonitas localidades de Dunmore East y Dungarvan, así como Tramore, un lugar muy popular para practicar deportes acuáticos.

Una de las mejores actividades para disfrutar en Waterford es recorrer a pie o en bicicleta el Camino de Waterford, una antigua vía férrea de 46 kilómetros que comienza en Grattan Quay (Waterford) y recorre castillos normandos, ruinas medievales y un asentamiento vikingo, antes de acabar en el bonito pueblo costero de Dungarvan.

¿Te apetece hacer senderismo? Las rocosas montañas de Comeragh ofrecen magníficas rutas a pie. A 30 minutos en coche se encuentran las cataratas de Mahon y el lago glacial de Coumshingaun, que está por encima del nivel del mar y del que se dice que no tiene fondo y es negro como la noche.

Waterford cuenta con su propio Geoparque Mundial de la UNESCO. Se trata de la Costa del Cobre, con 25 kilómetros de acantilados, calas e islotes. Debe su nombre a las antiguas minas de cobre de la zona y está repleta de historias fascinantes y calas ocultas. Además, es un lugar muy popular para practicar kayak. Mientras exploras, no te pierdas el Metal Man de Newtown Head, un marinero enorme encaramado en una columna que indica a los navegantes que están entrando en la bahía de Tramore.

Entonces, ¿quién se viene al condado de Waterford?